¿Se ha fijado en los mensajes publicitarios de las marcas más importantes? ¿No le parece que se están humanizando? ¿No le da la sensación de que están cambiando el “soy el mejor” por el “juntos seremos más felices”?
Efectivamente las tendencias recientes en publicidad, más aún con la crisis que azota nuestros mercados, tienden a humanizarse. Se están cambiando logotipos y gráficos por sonrisas y sensaciones. ¿Quiere vender su marca? Pues si hacemos caso a los expertos lo que se lleva ahora no es hablar de las características que tiene su producto y de qué lo hace mejor, sino de las sensaciones que nos provocará su uso.
En cualquier caso, esto ya lo sabíamos. Desde aquí siempre hemos hablado de que lo realmente importante es hablar de los beneficios del producto, aunque lo que sí se está agudizando, cada vez más, es la búsqueda de los sentimientos más humanos y afectivos. El éxito y el glamour estarán siempre de moda, pero lo que se lleva ahora es centrarse en la amistad, la felicidad, el compañerismo...
Hemos pasado del “ciritione” al “amor”. Igual debería cambiar el título de esta sección por “Publicidad con Amor”.
Hemos dejado de observar los tecnicismos y las palabras complejas que le proporcionaban a los productos características casi mágicas, por otros conceptos más cercanos y que entendemos mucho mejor: pasión, alegría, humor...
Ahora vende mezclar todos esos sentimientos con mensajes más solidarios y cercanos. En plena crisis en la que la seguridad y la tranquilidad son valores en alza las marcas han decidido, y no es mala idea para nuestra publicidad, arrimar el hombro y utilizar mensajes sociales y solidarios.
Es inevitable, si la campaña se realiza adecuadamente, que el consumidor nos elija porque le resultamos más simpáticos, conectamos mejor con él, somos más solidarios. El consumidor estará dispuesto a pagar un poco más si se identifica con nuestra marca.
Y la respuesta para elegir esos valores y conectar con el consumidor es la misma de siempre: Observar. Conozca le realidad social de su entorno, su ciudad, su país... descubra cómo les gustaría sentirse a sus clientes y ver en qué medida su producto puede satisfacer esas necesidades. A partir de ahí ya tiene el argumento para su próxima campaña de publicidad.
Un dato: El director de efectividad de Adam & Eve DDB, Les Binet, ha anunciado que “recientes estudios señalan que la publicidad que evoca una respuesta emocional es capaz de producir el doble de beneficios en un plazo de tres años en comparación con el resto de formas publicitarias”. Un consejo: Mire en su interior y observe la realidad social que le rodea. De ahí podrá obtener los valores emocionales que están en alza. Elija los que su producto pueda satisfacer con mayor acierto y se convertirá en una marca agradable para el consumidor. Actualidad: Vemos constantemente cómo las campañas de sensibilización buscan alcanzar al consumidor apelando a las tragedias que existen en el mundo, sin embargo la agencia McCann Melbourne ha realizado la campaña “Dumbs Way to Die” (maneras tontas de morir) a través del humor y de la animación, para reducir las muertes en las vías del tren. Una campaña muy viral y de gran éxito. El resbalón publicitario: Y todo lo contrario a dejar buenas sensaciones en los consumidores son las denuncias que algunas marcas reciben por incumplir con la legalidad. La Asociación de Usuarios de Comunicación ha denunciado que algunas marcas de bebidas alcohólicas de alta graduación siguen haciendo uso de vallas publicitarias para promocionar sus productos, a la vista indiscriminada de todo tipo de público, algo que está prohibido por la ley. La AUC recalcó la importancia del incumplimiento, debido a que el consumo del alcohol es un problema de salud pública preocupante entre los menores de edad. |
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