Emplazamiento de Producto¿Te imaginas a tu locutor de radio preferido diciendo en antena lo mucho que le gusta una Coca Cola? ¿O tú propia marca? ¿Te has fijado cuando de repente el presentador del tiempo deja de hablar de borrascas para explicarte el fabuloso seguro de salud que ha adquirido? ¿Piensas que en la película que viste este fin de semana es casual que la marca de ordenadores de los protagonistas sea Apple y su coche Volkswagen? Qué curioso, estás jugando a un videojuego de coches, y constantemente pasas por delante de un Burguer King. Estás siendo víctima de “product placement”.

El product placement, publicidad por emplazamiento, emplazamiento publicitario o posicionamiento de producto es una técnica publicitaria que consiste en la inserción de un producto, marca o mensaje dentro de un programa de televisión o radio, una película, serie, video musical, videojuego… en definitiva esta técnica muestra a los protagonistas de cualquier soporte destinado al gran público interactuando con el producto en cuestión.

Lo cierto es que es una técnica en auge debido a la saturación de impactos publicitarios, y busca poner ante los sentidos del consumidor un producto, fuera de los tradicionales canales de publicidad.

Pero el objetivo real del posicionamiento de productos no se limita a colocar el producto, sino que busca establecer una asociación psicológica entre consumidor y producto, en una situación ideal que refuerza los sentimientos positivos hacia al producto.

Suele funcionar bien con productos de uso genérico, debido a que muchos medios se dirigen al gran público. Pero el reto es realmente lo contrario, encontrar un medio que llegue al público que realmente necesitamos, elegir el espacio, programa, película, etc., donde se encuentren el mayor número posible de potenciales consumidores y mostrarles una situación con la que se identifiquen psicológicamente. Si buscamos niños igual hay que elegir una serie infantil donde jueguen alegremente con el producto, o si buscamos público adulto con poder adquisitivo alto podríamos decantarnos por informativos o programas de divulgación cultural donde el producto solucione un problema familiar.

El product placement, en función de la agresividad de su protagonismo, puede ser:

  • Pasivo: El producto es una parte más de decorado, aparece en la escena pero no cobra protagonismo.
  • Activo: El producto interactúa con los personajes, pero no se refieren a él.
  • Activo con mención: Los personajes, además de interactuar con el producto lo nombran.
  • Activo con alusión: El producto, además de ser nombrado, se mencionan algunas de sus cualidades.

Y en cuanto a la producción de dicha publicidad se utilizan habitualmente dos recursos. Por un lado la metáfora, que busca situaciones ideales abstrayéndose del tiempo y el espacio, y donde será fácil conectar con una situación psicológicamente favorable para el consumidor. Por otra parte, la metonimia que busca situaciones más reales y concretas.

Un dato: El product placement es considerado una forma de publicidad subliminal, pues pretende influir en el consumidor para que adquiera determinados productos sin citarlos explícitamente.

Un consejo: Busca situaciones suficientemente específicas que atraigan la atención del público que te interesa, pero no tanto como para que el número de consumidores aludido sea muy bajo. Encuentra el equilibrio.

Actualidad: Según un estudio PQ Media, en 2014 el product placement creció en todo el mundo un 12,8% hasta alcanzar los 6.010 millones de dólares. Creció especialmente en Brasil, con mucha presencia en las telenovelas. La televisión es el medio que capta la mayor parte de la inversión, aunque el cine obtiene una buena presencia de productos emplazados.

El resbalón publicitario: La compañía Mars rechazó la propuesta de Steven Spielberg para realizar con M&M’s una campaña de emplazamiento publicitario en la película E.T. El Extraterrestre. Finalmente utilizó los Reese's Pieces de The Hershey Company, cuyas ventas se incrementaron un 80% tras el extreno de la película.